Todos cuando hemos sido niños hemos sido por definición “pedigüeños”, siempre hemos querido tener más y más de todo.
Ahora, cuando eres padre te das cuenta de aquellas actitudes y las ves reflejadas en tus hijos; ahora nos toca “lidiar” con ellos, e intentas por todos los medios que sean “responsables” a la hora de consumir.
En un entorno como el que estamos de crisis económica y ahora, los padres podemos tenerlo “más sencillo” contándoles a nuestro hijos la verdad de la situación y haciéndoles comprender que no se puede estar constantemente comprando, gastando de manera “inútil”.
Pero realmente lo que puede ser y debería ser lo razonable es habituarles a un “consumo” responsable, a que deben de tener lo que necesitan pero sin despilfarrar.
Y es así como intentamos educar a nuestros hijos, haciéndoles comprender lo que se debe y lo que no; lo que es necesario, lo que es un capricho y hasta donde podemos llegar.
Y la verdad es que no puedo quejarme de mis hijos, son bastante “conformados” en ese sentido y nos lo demuestras con sus actos que comprenden como “funcionan las cosas”.
Y sobre todo porque ellos mismos deben de ver que esta es una manera de afrontar la vida, independientemente de si se puede o no, la pregunta es si se debe.
No mal acostumbrarlos a tenerlo todo, no darles los caprichos que pidan y hacerles entender que deben “ganarlos”, que todo en esta vida tiene un “precio” y que hay que ganarse las cosas.
Y es realmente agradable y sorprendente cuando los vemos ahorrar para conseguir algo que quieren o “reciclar” algo que ha heredado de sus hermanos mayores.
Enseñémosles, acostumbrémosles e intentemos crear consumidores responsables y comprometidos.
Somos nosotros, los padres, lo que debemos de educar a nuestros hijos, los que debemos hacer que el día de mañana sean responsables, mejores personas, pero a la ves evitaremos “frustraciones” innecesarias y conseguiremos la meta de todos los padres conseguir que sean felices.
Sabias reflexiones Isaac. Para los que estamos empezando, hay que educara los hijos desde el principio, en valores como la responsabilidad y el respeto. En eso estoy, jeje. Saludos.