Hay momentos en esta vida que tienes sorpresas, y sorpresas muy gratas, y si además vienen acompañadas de música, pues mejor que mejor.
Y eso fue lo que me paso el viernes 24 de Enero en el Teatro Arbolé, cuando comencé a oír como sonaban Marta Robles y Alba Carmona sobre el escenario, segundo concierto del ciclo #LosQueSiempreVuelven.
Pensando que íbamos a ver a las Migas, nos encontramos con una Marta Robles a la guitarra “flamenca” y Alba Carmona que iban a ofrecernos durante más de una hora una serie de canciones que constituyen una serie que ellas mismas llaman “Alusiones al Mar”.
Sonidos del mar, canciones de mar y marineros, marcadas por el mar que las “baña” el Mediterráneo, pero acercándose a Cuba y a Galicia, poniendo el flamenco en primera persona, ya que por algo es su sello de identidad, pero acercándonos a otros ritmos; influencias sefardíes o andalusís fueron mezclados con gran talento con el son cubano, la canción “tradicional” catalana o la música tradicional griega a ritmo de fandango.
Una hora en la que la voz de Alba Carmona lleno el Teatro Arbolé, trasladándonos por los mares del planeta, mientras Marta Robles nos hacía soñar con los acordes de su guitarra; mientras Aleix Tobías hacía sonar la percusión y Oriol Riart “remataba” la faena alternando el contrabajo con el tres cubano.
Una vez más “pleno” por parte del Teatro Arbolé, a quien quiero agradecer el acércanos a tan grandes artistas y descubrirnos nuevas músicas, nuevos sonidos, nuevos sentimientos… y a Alba Carmona y su cuarteto por trasmitirnos sus emociones y hacerlas nuestras durante un ratito, espero que como dice el “slogan” del ciclo que Siempre Vuelvan.