Las redes sociales son, en estos momentos, el mejor medio para darnos a conocer como empresa, profesional o servicio dentro de Internet, y por extensión, al mundo real.
Dentro de las redes sociales, Facebook y Twitter son las que se llevan “la palma”. Pero ¿qué es lo que buscamos las empresas cuando publicamos algo en ellas?, y lo que es más importante, ¿cómo podemos conseguirlo?.
Las empresas buscamos que el máximo posible de personas nos vean, que «pinchen» en nuestro producto o servicio, en nuestra página, y que finalmente «compren» lo que nosotros ofrecemos.
Pero ¿cómo conseguimos llegar al máximo público posible?, ¿cómo hacemos para crear una ausencia lo más grande posible para que nuestros mensajes tengan mayor difusión?
Hay muchas empresas que se dedican a “inundar” las redes con su información, sin darse cuenta de que al final sus mensajes llegan siempre al mismo grupo de personas: sus seguidores, su comunidad. Y en algunos casos, como puede ocurrir en Facebook, ni tan siquiera a ellos.
Por esa razón, tan importante como el número de mensajes es la relación y la viralidad que se consigue con ellos si queremos que realmente sean efectivos.
Un entrada en Facebook tiene mayor visibilidad cuanta mayor “relevancia” tiene; pensemos que el Timeline de muchos usuarios se encuentra “ordenado” por lo que Facebook denomina “historias destacadas”, las cuales son aquellas que pertenecen a las personas con las que más “interactuamos” o las que han tenido más interacciones por parte de usuario de la red.
Por eso todas las interacciones que un usuario haga con nuestras publicaciones en Facebook son inportantes, todas suman y hacen que la publicación gane visibilidad, que es de lo que se trata.
La primera de ellas es el «archiconocido» “Me gusta”, una de las opciones que han convertido a Facebook en una red social tan popular; cuantos más “Me gusta” tanga una publicación, más “popular” se vuelve… y por lo tanto más visible.
La segunda de las interacciones importantes son los comentarios, que aumentan igualmente la popularidad de una entrada en el Facebook. Además si la publicación está como “pública”, aquello a lo que le demos “Me gusta” o “comentemos” será accesible por nuestros contactos aunque que estos no tengan dentro de “su red” al autor de la publicación.
Pero es importante saber que una publicación llega a nuestros contactos y no a todos, ya que actualmente los «Timelines» avanzan a una gran velocidad a medida que avanza el día… y nuevas publicaciones «tapan» las anteriores.
Entonces, ¿cómo podemos conseguir que nuestro impacto aumente?, ¿cómo llegamos más lejos, a más usuarios? pues la solución está en «compartir».
Lo maravilloso de Internet y de las redes sociales es la difusión que puede llegar a tener una publicación subida a ellas, y dentro de Facebook, el compartir es el principal vehículo para lograr esta difusión.
Cuando le damos a compartir a una publicación en Facebook ésta podrá llegar a todos nuestros contactos, sumándose a los que ya tuviera el que compartió la noticia originalmente.
A partir de ese momento, muchos a los que no teníamos acceso, si éramos quienes habían subido la noticia, tendrán visibilidad de la misma.
Y además estos “receptores” de la noticia podrán también interactuar con ella, y así continuar haciendo que su visibilidad y popularidad aumente.
Con esta estructura en “árbol” se consigue que la viralidad de la noticia aumente “contagiando” al máximo posible de gente.
Y puestos a viralizar, y a hacer que nuestras publicaciones tengan la mayor visibilidad posible lo “ideal” sería que nuestras publicaciones fueran compartidas por personas con las que “tenemos poco en común”, o lo que es lo mismo: nuestras redes de contactos tienen pocos contactos comunes, y así conseguiremos que nuestra publicación llegue a más gente diferente.
Con estas pequeñas acciones conseguiremos una mayor difusión de nuestras “noticias” y sacarle el partido a Facebook que como empresas y profesionales esperamos.