Hoy por la tarde último día de Abril me he diriguido al edificio CIEM de Zaragoza por una razón que lo merecía, igual que merecía la pena, aunque me fastidiase, el perderme el Twitterllon que @gmolino había preparado en La Azucarera.
Esta tarde me he acercado al CIEM por que Iniciador volvía a Zaragoza.
Tras seis largos meses de parón, en el cual por diferentes motivos no se han celebrado Iniciadores, hoy 30 de Abril ha vuelto a Zaragoza, y sus organizadores Fernando Tomás y Eduardo Paz han querido hacerlo con un tema que interesa a muchos emprendedores, la financiación de los proyectos emprendedores.
Bajo el título Financiación de Start-Ups y con Sébastien Chartier la charla se tormaba más que interesante.
Sebastián Chartier es un emprendedor que ha estado a ambos lados, desde el lado del emprendedor y desde el de los inversores.
Igual que otras veces, el Iniciador se mantuvo fiel a su formato, primero con las presentaciones de los emprendedores, quienes poco a poco fueron contando a los asistentes sus proyectos emprendedores, para luego entrar de lleno en la charla de Sebastián.
Su charla se centró sobre la financiación, pero dejando claro en todo momento que grandes ideas o empresas que hacen dinero de manera rápida, salen en España una de cada cien.
Dio muchas “pinceladas” de cómo enfrentarnos a una ronda de financiación y a inversores, pero advirtiendo a los asistentes de las dificultades de conseguir financiación, de huir de las frases vacías que todo el mundo dice y recomendando maquillar la compañía ante el inversor teniendo cuidado con no vender humo.
Sebastián habló también de las 3F de la financiación (del inglés Family, Friends & Fools, familiares , amigos y locos) pero añadió una cuarta F (Founder, el Fundador), dejando claro que el emprendedor debe ser el primero en creer en su proyecto, en “jugarse” su dinero y su tiempo, en involucrarse al 100% en el proyecto a fin de hacer que el resto del mundo se “enamore” de su proyecto.
Según Sebastián, ahora mismo en España se vivía en una burbuja de emprendedores e inversores que comparó un poco con la burbuja de las punto com de finales de los 90.
Pero nos animó a los emprendedores a seguir adelante en nuestros proyectos, a echarle el coraje necesario para sacarlos adelante y a trabajar si realmente estamos convencidos de ello.
Gracias una vez más a los organizadores y a los patrocinadores y espero que no tarde tanto tiempo el próximo.